Un mes, sólo un mes para que comience mi aventura Erasmus en Oldenburg. La verdad es que empiezo a sentir como se me vienen las cosas encima y los nervios están, aunque muy tenues, apareciendo.


Un mes sólo para disfrutar de la vida en San Fernando, de la comida de mi madre, de las comodidades del hogar, del clima y de Glori.


Ya tengo casa pero no las asignaturas que estudiaré en ella; toda una odisea está siendo, no por mí sino porque unas veces mi coordinador no está y otras las asignaturas no están listas desde la universidad.


Sólo un mes para preparar que me voy a llevar para 9 meses, como mínimo hasta junio. El problema no es el peso de las maletas sino como meter mi vida en 40 kilos. Tendré que seleccionar muy cuidadosamente que llevarme ya que tengo demasiadas cosas y muchas no las uso nunca.


Ay Oldenburg, que poco queda para que nos conozcamos.





[caption id="attachment_567" align="aligncenter" width="500" caption="Situación de Oldeburg en el norte de Alemania"]Situación de Oldeburg en el norte de Alemania[/caption]

Mi residencia tampoco está mal situada. Es el edificio grande.

[caption id="attachment_572" align="aligncenter" width="500" caption="Mi hogar en Oldenburg"]Mi hogar en Oldenburg[/caption]

Cuando coma escribiré otra entrada. Bye bye.

Vaya con la universidad de Oldenburg, si parecen españoles. Me quedan seis semanas para estar allí y aún no puedo ver los temarios de las asignaturas con lo que no se de que me voy a matricular.


Quiero poder elegir la asignaturas ya y poder olvidarme un poco y centrarme en los exámenes de aquí, que está al caer. Por cierto, que ya hay muchos estudiantes de Erasmus y todos disfrutando de sus estancias, con lo que tengo una pelusilla terrible.


A ver si puedo arreglar esto mañana. Mañana iré banco por banco a ver si me dan una tarjeta de crédito pero no me la cobran cuando tenga 25, una odisea.


Bye bye.

Lo de Florentino Pérez no tiene otro nombre en estos días. Su actitud prepotente, chulesca y descarada no deja indiferente a nadie, ni para bien ni para mal. Ha hecho del Madrid lo que era, la envidia del mundo entero y no ese juguete roto que dejó tras de si el presidente anterior, Calderón.


Además, se l atribuyen méritos que no lo son tanto. Dame 200 000 000 € y verás que equipo que hago. Así también soy yo empresario de éxito.


Pero claro, todo esto tiene un precio. Lógicamente ese precio no lo está pagando el Madrid, ni él mismo, lo estamos pagando todos. Todos nosotros que tenemos dinero en bancos y cajas de ahorro, concretamente el Santander y Caja Madrid, quien si no.


Pues ya ves, aún no me he ido y ya me he comprado el billete para mi primer viaje turístico desde Alemania. El viaje va a ser a Londres. Que si, que ya se que va a ser la tercera vez que voy, pero es que el vuelo me sale por 2€ ida y vuelta. El precio es casi regalado y me parece un insulto no ir.


En cuanto a fechas también me sale muy bien ya que sería la segunda semana que estoy allí, cuando aún no tengo clases, ya me conocería un poco la zona y me encanta la idea de volver a Londres.


Bien, un día en el que todo son alegrías. Por fin han salido las resoluciones de las becas del MEPSYD de Francias et voilà, ¡concedida! Que contento que estoy hoy, por fin podré ver a Mickey en persona. Tengo ganas de ajustarle las cuentas a ese ratón jeje.


El día comenzó muy bien con el primer examen de la temporada. Era de Organización y Gestión Empresarial 2 y, por como me ha salido, creo que me la he quitado como un campeón. No me ha resultado demasiado difícil pero iba algo nervioso. Incluso ayer por la noche me costó conciliar el sueño.


Espero que estéis pasando un bueno fin de semana. Voy a contaros hoy un par de curiosidades sobre una pelicula que vi ayer en mi MacBook. Si lo habéis adivinado, 7 años en el Tíbet.


Grosso modo, la peli va de unos alpinistas austriacos que, al estallar la II Guerra Mundial, son capturados por los británicos en la India. Escapan tras cuatro años del campo de prisioneros y  se ven obligados a permanecer en el Tibet durante la guerra, por no poder volver a su hogar. Uno de ellos se casa con una nativa y el otro se hace consejero del Dalai Lama. Este último vuelve a Austria, finalmente.


Después del empacho de emociones de estos días que hemos dejado atrás, me encuentro un poco resacoso. Mucho ha pasado estos días desde que el Barça haya ganado el triplete hasta que tengo conjuntivitis. Las alegrías nunca llegan solas dicen.


Ya se acabaron las clases y toca estudiar en casa. Está bien esto de no tener que desplazarse hasta Cádiz pero quedarse a estudiar con la de cosas que tengo para distraerme está regular. No he contado cuantos exámenes voy a tener, mi objetivo es ir uno a uno, para tratar de sacar el máximo de ellas. Lo que si se es que me voy a llevar liado hasta el 2 de julio, una eternidad me queda.