Crónica del tercer día de huelga de tripulantes de British Airways, con nueve vuelos entre España y Londres cancelados, lo que suma 18 desde que comenzó.


Los vuelos cancelados ayer eran cuatro en Madrid-Barajas, tres en Barcelona-El Prat y dos desde Málaga. El día anterior fueron once vuelos cancelados España - Reino Unido. Ayer concluyó la primera tanda de la huelga, que será retomada del 27 al 30 de este mes. Se para debido al proceso de fusión de BA con Iberia, que parece ser el motivo de la huelga en sí.


La verdad es que es una faena cuando no te puedes mover como quisieras. El noviembre pasado fue el torneo de futbol para la integración, algo así como International Football Tournament. Mi equipo quedó segundo pero sufrí las consecuencias de las ganas de ganar, me fastidié una uña. Logicamente no iba a ser una de las pequeñitas, no. La gordota.


Ahora, meses después de eso,  y unas tres semanas despues de que Gloria tratara de arreglarme la uña, parcialmente despegada, he ido al podólogo.


Ha sido breve pero intenso. Sin anestesia, con frío.


Ahora, pasado los efectos, el resultado es un gran agujero donde antes había uña y un profundo dolor en el dedo.


Era totalmente necesario ya que si llega a hincar más en la carne, a ver que hago yo en Alemania...

Quedan menos de dos semanas para volver a Alemania. El tiempo ha cambiado mucho ya que me fui después de las nevadas y ahora están a 10/12º casi todos los días. Lloviendo, eso sí, pero con un buen tiempo para ser Oldenburg.


Ya estoy planeando el viaje a Frankfurt con Gloria y Ronda para los días 1, 2 y 3 de abril. Supongo que estaremos por Frankfurt y lo veremos bien, por Mainz y listo, ya que ellas tienen el vuelo por la mañana el día 3 y yo, a volverme al norte alemán.


En Frankfurt me gustaría ver la Plaza del Rommemberg, donde están las típicas casas alemanas y la catedral. Si tenemos tiempo pasear por la orilla del río, ver el Banco Europeo, subir al rascacielos Torre Main (256m) para tener una bonita vista de Frankfurt. Si podemos también me gustaría ir al cementerio Judio, que es un parque inmenso con bosque profundo.


El mundo está loco. Ya no solo hemos perdido valores básicos como el respeto a los mayores, la limpieza de las calles o la educación sino que hemos dado un paso más, los que menos culpa tienen, los que no se pueden valer de sí mismos, los minusvalidos.


La noticia la he leído hoy en algún blog y habla de que dos jóvenes Australianos de 15 y 16 años se acercaron a un joven Canadiense en silla de ruedas en un ascensor y empezaron a darle puñetazos, patadas, e incluso golpes con una barra de hierro, dejándole con conmoción cerebral. Escalofriante.


Han pasado 6 años desde los atentados de Madrid. Todo cambió aquella mañana. No nos podíamos despegar de la televisión y las llamadas de móvil eran constantes para verificar el estado de salud de amigos y familiares. Lógicamente fue mucho más duro para los madrileños que para el resto de los españoles.


Los atentados trajeron consigo un par de cambios para la sociedad española. El primero, político, pues fue la base de campaña de desprestigio del PSOE a PP que le hizo ganar las elecciones en 2004.


Alemania tiene mejores carreteras que España. En ellas puedes circular a la velocidad que quieras en algunos tramos pero todos respetan cuando deben.


Son más cívicos que nosotros. Reciclan mucho más. Separan perfectamente y de costumbre papel, vidrio, plástico y restos de comida. Pueden sacar la basura a la hora que quieran y no hay nada por el suelo. Recogen todos sus restos en cafeterias, bibliotecas e incluso por la calle.


El pasado sábado, con todos dormidos, decidi impulsivamente ir a Bremen a echar la mañana. No era para echarla de cualquier forma. tenía la intención de aprovechar la mañana tomando fotos. Era una buena mañana, fría como todas las de invierno aquí pero clara, sin lluvia o nieve. Perfecta para la fotografía.


Salí de casa con el tripode en el hombro dispuesto a explayarme, tomarme mi tiempo y disfrutarlas. Empecé por la estación, a la que tomé un par de fotos. Tomé el tranvía para bajarme en el centro y pasar allí la mayor parte de mi tiempo.